Frase de la Semana.

"Por lo cual la ley es debilitada, y el juicio no sale según la verdad; por cuanto el impio asedia al justo, por eso sale torcida la justicia" [Habacuc 1:4]


miércoles, 5 de enero de 2011

Cuando el ejecutivo nos quiere reclutar

Por Dionis Mezquita


Este tópico  identifica solo aquellos que se equivocaron de vestimenta, manchando a los hombres ilustres que le hacen honor a un verdadero hombre de uniforme y su servicio a la patria.

Los ejércitos del este mundo agrupan un conglomerado exclusivo de innumerables alistados, los cuales creyendo o no en el sistema, se enfilan a formar parte de una estadística única en cualquier punto cardinal en el Globo Terráqueo.

Ser miembro de un Cuerpo Castrense le hace sentir útil y poder defender a la patria que pertenece. Le da honor vestir un uniforme; conlleva a ser respetado, admirado y le llena de orgullo decir; ‘yo soy un oficial del cuerpo militar de mi país’

No cabe duda que ‘los hombres de uniformes’ son protagonistas de muchas cosas buenas en la sociedad; ponen el orden, ahuyentan a los ladrones, disminuyen el vandalismo y crean un ambiente de paz a los moradores del lugar, motivando seguridad a sus hermanos y un respeto absoluto.

Suena hermoso y real, aunque así debería ser, ahora que el hombre haya cambiado el curso de los ríos y el viento, entorpeciendo la ruta del tiempo, ya eso entra en otro tópico, pues vestirse de uniforme que da respeto a los hombres que los visten, automáticamente,  significa orden, pero decirlo y hacerlo son temas a discutir en otro escrito.

Pero resulta que si se utiliza para todo lo contrario, pasando a formar parte de los hombres que encubren su identidad, aparentando una cosa y demostrando otra; como tener doble vida, doble daño, pues fueron reclutados para dar seguridad a la ciudadanía y son los que convierten el lugar en una vida hostil a sus moradores, trayendo la inseguridad, la preocupación de temor y aumentando el miedo.

 El manual de reglamento y el código ético empiezan a deteriorarse y perderse la misión, para la cual fueron encomendados a servir, al momento de recibir órdenes equivocas por sectores ocultos.

Nacemos para servir, esa es la misión principal, haciendo el servicio hacemos justicia y este es el deber de los hombres que juran a la patria, juran para el deber, juran por la honestidad, juran por una integridad, juran por cuidar a sus semejantes. Y podemos agregar que con o sin uniforme, este código debe ser obligatorio para todo ser humano.

Pero, el peligro nos asecha, al llegar a conseguir los rangos a base de sobornos, de trabajos dudosos, de servicios inescrupulosos, amiguismo, de favores adrede y cumplimientos ilegales[aunque no siempre], entonces el servicio que tenemos que cumplir para los más débiles da un revés para servir al ‘poder’  corrupto y al arrogante, dejando su misión en el olvido y sirviéndose de la sangre inocente, maltratando a quien debió servir, culpando a quien tiene que defender y humillando a quien debería ayudar.

El uniforme los marca en un ejército al servicio del mal y unos hombres que se enfilaron para servir al orden, mas hoy se nutren de la inocencia y maltratan a sus hermanos.

Así mismo sucede cuando el Padre Todopoderoso nos llama a servirle en su ejército, a servir a necesitado, sin ver rostro, color, genero aun siendo una persona de poder estamos prestos a darle una mano.

Muchas veces la riqueza de un hombre no consiste en cuanto dinero tiene, el objetivo de cada ser humano es diferente, por tal razón dice una frase famosa; “Cada cabeza es un mundo” y cada quien tiene su propia misión.

No es más rico el hombre por abrigar más dinero, a veces mucho no es más, y el objetivo individual hace una diferencia en lo que queremos conseguir y lo donde queremos llegar.

Visto de ambos lados, solo la persona misma es la que decide cual quiere escoger, riqueza material o herencia espiritual, es obvio si tú eliges anotarte en el ejército humano, aunque existen excepciones, o alistarte en el Ejército de Dios.

Si hablamos del precio, es una gran diferencia, si mencionamos la recompensa no existe comparación, si decides la humana contra la espiritual, veras la distancia del cielo a la tierra.

Ser Soldado del Padre, no es poder terrenal, es poder celestial y tu misión estará dictada en el momento que des el paso.

No hay salario por el servicio, sino bendiciones. No hay contrato de trabajo, sino aceptar a Cristo como tu único Salvador. 

No hay encargos ni ordenes por memorándum, sino predicar la palabra, no hay lugar de servicio, sino que toda la tierra es tuya para alabar y dar Gloria y Honra al Señor. 

No espere circular, no cartas, ni telegramas, ni correo electrónico esperando una orden de servicios, no solo crees, pídele y el te contestara.

Abre las puertas de tu corazón y el entrara. Toca su puerta y el abrirá para tu servicio en la batalla. 

Salvar almas es tu misión, díselo a tu alma, consulta con tu corazón y elévale un canto y el te pondrá como guía, por siempre, el poder del Espíritu Santo.

“Es mucha la mies y pocos los obreros” decide tú, la elección no es mandatorio, es voluntaria; la recompensa, vida eterna. [Lucas 10:2; Les dijo: “Ciertamente la mies es mucha, pero los obreros son pocos. Por eso, pedidle al Dueño de la mies que mande obreros a recogerla”]

Si prefieres un rango de aquí, es tu decisión tu jefe te puede apuntar y podrás ascender, pero si prefieres un lugar con el Padre el Ejecutivo del Ejercito de Dios esto es sabiduría y tu elección te puede salvar. [Genesis 32:2; Cuando Jacob los vio, dijo: “Este es un Ejercito de Dios”]

Dios espera por tu alistamiento, ya es hora no lo pienses mas, solo llámale y el te responderá, ábrele la puerta de tu corazón y el entrara.

Dios te bendiga en este día,

No olvides piensa siempre en los demás.

lunes, 3 de enero de 2011

Cómo Trabaja el Correo Celestial?


Mensaje

Se que a veces juzgamos por la apariencia y entendemos que para el mundo, ese tipo de mercadeo vende, es lo lógico, la mayor parte de los ojos humanos solo depende de esas dos esferas humanas para poder ver llamados [OJOS], pero lo que no saben la mayoría, es que sin la luz seriamos tan ciegos como el que nunca los ha abierto, peor aún, no sabemos alimentarlos con la computadora mayor, llamada Cerebro.

Si te llega una carta, sin remitente y te dice; "Siempre que uses tu paracaídas, recuerda que en la mayor parte de ese paquete, esta Dios y un grupo de siervos que le llaman Ángeles, no se ven, pero nos cuidan"

Además están otros llamados Santos, que son los que te llevan el mensaje de Dios; él y solo él los escucha y los responde para ti.

Ese paracaídas que cada día usamos y que nos lanzamos al vacio para la batalla diaria, está preparado por Santos, ya sea que conozca o no, siempre vigilan, oran y obran por ti.

Que el paracaídas del 2011, sea para que la batalla te lleve a la Victoria, y solo Cristo Jesús te lleva a ganarla, él es Luz, Amor, Justicia, Misericordia y la Salvación.

Confía en él y serás Salvo y veras al Padre y día final.

Espero verte allá, el paracaídas está en tus manos y tu eres el unico que puedes guiarlo a tu Salvación.

Que Dios te Bendiga en este día y el año 2011.

Tu amigo y tu hermano para siempre......

Dionis Mezquita